¿Qué es una auditoría eléctrica?

La auditoría de la factura eléctrica debería constituir una práctica habitual en toda empresa y ayuntamiento, que no solo desee reducir el consumo de energía, sino también velar por la seguridad de sus sistemas, instalaciones y sobre todo, personas. Es preciso identificar la fiabilidad eléctrica y realizar una evaluación exhaustiva del sistema energético actual para conocer en detalle la situación en la que se encuentra la institución. Esta información es muy valiosa para ser utilizada como herramienta de medición en el momento de realizar cambios y mejoras en la tecnología existente de cara a reducir el consumo de electricidad. En Goodwork te contamos qué es una auditoría eléctrica, con que objetivos las realizamos y cuáles son sus ventajas.

AUDITORÍA ELÉCTRICA: ¿QUÉ ES?

Una auditoría eléctrica es un examen crítico y sistemático que omite un estudio competente del sistema energético presente. En Goodwork cuando vamos a realizar proyectos de iluminación de vía pública realizamos mediciones y diagnósticos previos al diseño e instalación de la iluminación para detectar los puntos débiles para reducir la factura eléctrica de clientes tanto en sectores residenciales como industriales. Como fabricantes de iluminación, nos encontramos a la vanguardia en el sector óptico y lumínico diseñando proyectos que van desde la consultoría, hasta la auditoría eléctrica y el estudio lumínico, diseño, instalación y mantenimiento.
Cuando se realiza una auditoría eléctrica hay una serie de objetivos básicos:

•       Comprobar que se cumple la legislación vigente.

•       Identificar aquellos puntos que no son conformes a la normativa y regulación existente.

•       Fijar una planificación de mejoras necesarias a realizar para lograr un sistema de mantenimiento eléctrico óptimo respecto a términos de seguridad, fiabilidad, etc.

•       Identificar posibles riesgos.

Las auditorías eléctricas, ayudan a empresas y municipios a optimizar sus sistemas y recursos. Para impulsar la excelencia operativa se debe ir más allá de la simple auditoría convencional. No se debe conformar con cambiar la iluminación tradicional a bombillas de bajo consumo, debe trabajar en la búsqueda de soluciones a medida. Es en este punto, donde Goodwork, como expertos en el sector óptico lumínico y en eficiencia energética, podemos ayudarte definiendo los problemas que están afectando a los programas de seguridad y mantenimiento desarrollando soluciones altamente eficientes. La auditoría eléctrica permite:

•       Mejorar la seguridad de las personas y de los equipos y/o
instalaciones.

•       Detectar riesgos, reducir incidentes y solventar
procedimientos inadecuados.

•       Reducir los costes operativos.

•       Mejorar la productividad.

AUDITORÍA ENERGÉTICA DE GOODWORK

En Goodwork llevamos años diseñando proyectos de iluminación LED de vía pública. Para realizar el diseño de iluminación de alumbrado público, hay que cumplir una normativa muy estricta y concreta: niveles de iluminación específicos conforme al tipo de vía, niveles de contaminación lumínica, etc. que muchas veces se pasan por alto por no hacer previamente un estudio de iluminación óptimo.
Mediante el alumbrado de vía pública podemos hacer que la ciudad tenga, no sólo beneficios económicos y ecológicos (nuestras luminarias LED reducen el consumo en un 80% y no contaminan), sino también para la salud de plantas, animales y personas.
A través de la última tecnología e innovación y junto a un equipo de profesionales que asesoran y acompañan en cada fase del proceso, siendo conscientes de la importancia vital que tiene la iluminación sobre la vida de las personas, logramos dar con la solución ideal a cada necesidad.

En Goodwork utilizamos sistemas de medición fotométrica in situ y seguimos una metodología de actuación muy meticulosa. ¿Esto que significa? Que para gestionar y analizar los datos de una auditoría energética hemos desarrollado una unidad móvil que, circulando por el municipio como cualquier otro vehículo, capta todos la información necesaria para realizar un estudio completo y en tiempo récord.

Los datos recogidos por la unidad móvil son procesados por personal especializado empleando un software propio que permite elaborar:
1 –    Un mapa lumínico del municipio, con valor puntual de luminancia y posición GPS
2 –    Un mapa con los valores medios de:

       • Luminancia.

       • Iluminancia mínima.

       • Iluminancia máxima.

       • Uniformidad media.

3 –    Un mapa con los distintos tipos de iluminación (HPS, HQI, Halógena…)

4 –    Un mapa de evaluación de las vías según la clase de alumbrado.

5 –    Un inventario de los puntos de luz:

       • Posición GPS.

       • Altura luminaria.

       • Tipo de iluminación.

6 –    Inventario 100%: parques, jardines, zonas peatonales, escaleras…

7 –    Datos exportables en SHP (GIS), Excel y KML

Ahora que ya conoces la importancia clave que tiene el realizar una correcta auditoría eléctrica para el éxito y consecución de tu proyecto, no lo dudes más y pásate al LED con Goodwork.

¿Cuánto se ahorra con la iluminación LED?

En Goodwork te hemos hablado en muchas ocasiones de las ventajas de la iluminación LED con respecto a la iluminación tradicional. Las ventajas de la tecnología LED para tu salud, para el entorno y para tu bolsillo. Ventajas que, sin duda, notarás en el ahorro de la vivienda, tu negocio y tu ciudad.

Los productos LED de Goodwork son ecológicos, aplicables y adaptables a todo tipo de proyectos de iluminación. Su uso permite reducir el consumo desde un 40% hasta un 90% manteniendo las mismas prestaciones de la iluminación convencional.


¿Cuánto puedo ahorrar con la iluminación LED?

El consumo de una luminaria de vapor de sodio es de 657 kw/año=78,84 €/año, mientras que una led consume 146 kw/año=17,52 €/año. Es decir, el ahorro de la iluminación LED es de más de 60 euros anuales por cada luminaria. Y el ahorro por no tener que sustituir las luminarias por la larga duración de los LED, son aproximadamente 17 euros anuales por cada luminaria. Esto hace un ahorro total de 100 euros anuales por cada luminaria. Un ahorro inmediato.

En Goodwork te ofrecemos la posibilidad de implantar y sustituir las luminarias de vapor de sodio o mercurio por unas nuevas lámparas LED. Las antiguas luminarias de vapor de sodio (y similares) consumen una potencia de 150W, con un 20% más que la potencia nominal cuando estas van quedándose obsoletas. Además, la duración de una luminaria de vapor de sodio de alta presión es de 3 años, mientras que las bombillas LED tienen una vida útil de casi 14 años.

También está comprobado que el uso de filtros coloreados es más versátil con la iluminación con LED, evitando el uso de costosos filtros en las dicroicas. Y con respecto a las halógenas, se evitan las costosas lentes difusoras.

No hay duda de que, en los tiempos que corren, a todos nos preocupa el gasto en nuestra factura y el ahorro en la vivienda. Gracias al uso eficiente de la energía, las bombillas LED consumen un 65% menos que las bombillas de bajo consumo y un 90% menos que las bombillas incandescentes tradicionales. Por lo que, el ahorro LED supone de media, si lo comparamos con iluminación tradicional, más de un 70%.

¿Cómo se consigue el Ahorro LED?

Nos dirigimos hacia la era de las smart cities, una era en la que se toma conciencia del uso responsable de las energías y el respeto al medio ambiente; y uno de sus puntos clave, es la smart lighting, o sea, el reemplazo de las bombillas tradicionales por bombillas led, mucho más respetuosas con el medio. De esta forma, mediante el ahorro de las bombillas LED, se optimiza la energía haciendo un buen uso de los recursos a través de la instalación de una iluminación más inteligente.

  1. Alta eficiencia: Las lámparas LED aprovechan un 90% de la energía que consumen para producir luz y sólo un 10%, para producir calor. En el caso de las incandescentes convencionales los valores se invierten: un 90% produce calor y un 10% produce luz. Teniendo en cuenta que, al contrario de todas las luminarias convencionales, solo una pequeña parte de la energía consumida por las lámparas LED se desperdicia emitiendo calor, los ahorros de energía suponen entre un 50% al 80%. Esto hace que la inversión inicial se amortice rápidamente. Las lámparas LED no necesitan calentarse previamente y por eso, tienen un encendido inmediato, no aumentan la temperatura ambiente y son mucho más eficaces.
  2. Muy bajo consumo: las luces LED en el hogar, en tu negocio o en tu municipio logran un importantísimo ahorro económico que puede llegar al 80% de la factura de la luz, con una rápida amortización de la inversión.
  3. Larga vida útil: las bombillas tradicionales se puedan romper fácilmente y sufren fallos por “fundido”. Su degradación es paulatina hasta que su luminosidad cae finalmente por debajo del 70%. Por el contrario la iluminación LED para el hogar puede durarte entre 12 y 14 años, con un funcionamiento de 10 horas diarias, 365 días al año. La vida útil de los LED incrementa el ahorro tanto en sustitución, como en mantenimiento.
  4. Encendido instantáneo: el encendido y apagado de los LED es instantáneo y a diferencia de otros sistemas convencionales no se degrada por el número de encendidos, lo que los hace muy eficaces energética y económicamente. Además, gracias al ahorro de las bombillas LED en tu hogar respecto al calor generado, se reducen los gastos relacionados con el aire acondicionado, puesto que el lugar se mantiene a la temperatura ambiente.
  5. Sustitución de antiguas luminarias: gracias a la amplia gama de formas y colores de los LED, estos pueden reemplazar casi cualquier luminaria. La tecnología LED se adapta a las necesidades estéticas de cada diseño de iluminación, tanto por su flexibilidad, como por su facilidad de regulación en la intensidad, como en el tono. A diferencia de las luces fluorescentes, por ejemplo, dicha tecnología soporta bajas temperaturas (hasta -40º), lo que las hace aptas para ser instaladas en lugares como cámaras frigoríficas.
  6. Ahorro en gastos de instalación: la iluminación LED, es la iluminación perfecta para instalaciones donde el mantenimiento es muy complicado, de acceso restringido o costoso, debido a su fácil y sencilla implantación y sustitución. La instalación se hace con cables de calibre mucho menor, lo que se traduce directamente en un ahorro en cableado e instalación. Además, como comentábamos anteriormente, gracias a su larga durabilidad, no tienen que estar reemplazándose constantemente. Por esto, se producen grandes ahorros en gastos de mantenimiento.


Consejos para conseguir un ahorro energético

  • Reemplaza las bombillas tradicionales por iluminación LED: vamos hacia la era de las smart cities y uno de sus puntos clave, es encontrar las formas de ahorrar energía optimizando y haciendo un buen uso de los recursos, como por ejemplo, a través de la instalación de iluminación inteligente. La tecnología LED tiene innumerables ventajas con respecto a la iluminación tradicional y no hay duda de que, en los tiempos que corren, a todos nos preocupa el ahorro en nuestra factura de la luz. Gracias al uso eficiente de la energía, los LED consumen un 65% menos que las bombillas de bajo consumo y un 90% menos que las bombillas incandescentes tradicionales.

    Las lámparas LED aprovechan un 90% de la energía que consumen para producir luz y un 10%, para producir calor. En el caso de las incandescentes convencionales los valores se invierten: un 90% produce calor y sólo un 10% produce luz. Teniendo en cuenta que, al contrario de todas las luminarias convencionales, solo una pequeña parte de la energía consumida por las lámparas LED se desperdicia emitiendo calor, los ahorros de energía suponen entre un 50% al 80%. Esto hace que la inversión inicial se amortice rápidamente. Las lámparas LED no necesitan calentarse previamente y por eso, tienen un encendido inmediato.

    Está más que demostrado, que el empleo de bombillas LED en el hogar, se encuentra entre las formas de ahorrar energía más útiles. Si las comparamos con otros tipos de iluminación, son las más seguras y duraderas. Al no estar hechas con filamentos que puedan romperse o quemarse, tienen una vida útil de unas 50.000 horas, frente a las 2.000 horas de una bombilla estándar; es decir, entre 20 y 30 años en un uso de 10 horas diarias durante 365 días al año. Esto supone un gran ahorro en gastos de mantenimiento pues no se tiene que estar reemplazando constantemente y es la iluminación perfecta para instalaciones donde el mantenimiento es muy complicado, de acceso restringido o costoso. Además, la implantación eléctrica de las lámparas LED, se hace con cables de calibre mucho menor, traducido directamente en un ahorro en cableado e instalación. En definitiva, el ahorro energético con LED es más que notable.

  • Aprovecha las horas de luz natural: la luz representa el 20% del gasto en energía en nuestros hogares. Por suerte, vivimos en un país en el que podemos disfrutar en la mayoría del territorio de casi 3.000 horas de luz solar al año. Si nos organizamos bien y aprovechamos las horas de luz del día para hacer nuestras tareas domésticas en este tiempo, puede ser una de las mejores y más sencillas formas de ahorrar energía. Puedes incluso disfrutar de tu tiempo de ocio, teniendo el placer de realizar actividades como leer, pintar, coser, trabajar en nuestro jardín, etc. a la luz del sol.
  • Apaga las luces: fíjate en que las luces de tu casa estén siempre apagadas cuando te vas y ten por costumbre el apagar el interruptor de la luz cada vez que te vayas de una habitación y verás como ésta, es una de las formas de ahorrar energía más eficientes, con tan sólo poner un poco de atención.
  • Apaga y desenchufa todo lo que no uses: apaga todo aquello que consume energía cuando no lo estés usando. A veces nos creemos que es más cómodo dejar los aparatos encendidos o en reposo, pero es mucho más el gasto que se produce en energía que en el tiempo que podamos gastar en encenderlos de nuevo en vez de dejarlos en stand by. En todo casi, en ordenadores y portátiles, por ejemplo, puedes usar el modo suspensión y ellos acabarán apagándose cuando no se hayan usado en un rato.
  • No tengas cargadores continuamente enchufados a la red: si trabajas con portátil, tablet o smartphone, acostúmbrate a enchufar estos aparatos sólo cuando les quede poca batería.
  • Adquiere electrodomésticos con certificación energética: si vas a renovar tus electrodomésticos, apuesta por el uso de electrodomésticos más ecológicos, eficientes y de bajo consumo para tu hogar. Un electrodoméstico energéticamente eficiente lo que hará es consumir el mínimo de energía posible ante una tarea determinada. Es cierto que a la hora de adquirirlos son un poco más caros, pero si calculas lo que puedes ahorrarte en su vida útil (aproximadamente unos 10 años) significa más de 200 euros al año.

    Nunca compres electrodomésticos más grandes de lo que necesitas y utiliza el lavavajillas y la lavadora con agua fría. Hoy en día los jabones y detergentes son lo suficientemente potentes como para poder lavar a temperaturas más bajas. Además tu ropa aguantará en mejor estado más tiempo. Infórmate de las recomendaciones del fabricante para hacer un buen uso del aparato a la hora del mantenimiento y la limpieza para prolongar su vida útil.


Consejos para ahorrar energía en invierno

Con la llegada del frío es normal que aumente el gasto de energía en nuestros hogares, con el consiguiente desembolso en nuestra factura. En invierno la factura de la luz se dispara, por eso es muy importante tener presente que existen formas de ahorrar energía que podemos conseguir con algunos simples gestos. Para que tu bolsillo no se resienta de más, en Goodwork tenemos algunos consejos que seguro te serán de utilidad para lograr un consumo de energía más eficiente y responsable.

  • Raciona el uso de la calefacción: asegúrate de tener ventanas y puertas bien cerradas para mantener el calor y no tengas la calefacción encendida en habitaciones en las que no estás. Utiliza termostatos para programar las horas de encendido y apagado. Restringe su uso por las noches, cuando estés en la cama y pon cortinas y alfombras para que el frío no se cuele por suelo o paredes. Aisla adecuadamente tu espacio.
  • Adapta tu ropa al invierno: parece algo obvio, pero a veces nos olvidamos y queremos estar con ropa más ligera de lo que el clima en realidad lo permite para esa estación. Intenta abrigarte lo necesario en invierno para no subir la calefacción.

No lo dudes más y pásate al LED con Goodwork.

Homogeneidad: La base de una buena iluminación

La luz afecta a cómo percibimos y cómo nos movemos en un espacio dado. Afecta incluso a la manera en la que nos relacionamos con los demás. Seguro que has notado que en los ambientes en los que la iluminación es más confortable, en los lugares en los que te sientes más cómodo y el clima es más distendido; las personas se mueven con mayor libertad, se acercan más para conversar e interactúan sintiéndose a gusto. Por el contrario, en aquellos espacios en los que la iluminación es más intensa y brillante, molesta y tendemos a poner más distancia entre nosotros y el entorno. No actuamos de la misma manera y podemos sentirnos desorientados.

Una luz homogénea es esencial para armonizar los espacios, tanto interiores, como exteriores. Podremos disfrutar más de las proporciones, las texturas, las líneas y las formas, sin deslumbramientos, ni conos de sombra bruscos e indeseados.

La iluminación tradicional, en general, tiene poca apertura de ángulo y poca capacidad de enfoque. Proyecta círculos desenfocados y crea zonas negras en el centro, por lo que no es una iluminación precisa, ni fácil de controlar. No es una iluminación recomendable para áreas residenciales porque, tanto viandantes, como conductores, pierden en calidad de vida.

Las lámparas convencionales enfocan aproximadamente entre un 30 y un 50% de su potencia luminosa en un solo punto y sin embargo, mientras este punto en concreto deslumbra, las zonas próximas a él se vuelven oscuras para el observador.

Las lámparas de iluminación LED de Goodwork tienen un alto índice de homogeneidad gracias a sus amplios ángulos de apertura y a la gran calidad de sus lentes de vidrio de borosilicato, que cumplen con los más altos estándares y requerimientos del mercado. Lámparas LED que bañan con una iluminación uniforme y acogedora el área a iluminar.

Una iluminación homogénea no sólo ayuda a aumentar el confort visual de los usuarios, sino que hace que estos se sientan más seguros y vivan más su ciudad. Está demostrado que aquellas zonas en las que la iluminación no es buena, en el sentido de la insuficiencia lumínica, de muchas zonas oscuras, baja intensidad, etc. el índice de vandalismo, robos y delitos aumenta. Con la iluminación LED de Goodwork hemos logrado que zonas de vía pública, como por ejemplo, parques o arboledas, que antes eran áreas más inseguras para sus vecinos a la hora de caer la noche, ahora sean zonas tranquilas y de las que apetece disfrutar a cualquier hora del día.

Y si nos referimos a la iluminación en áreas de trabajo, hay que poner mucho énfasis en el estudio de la creación de espacios que doten de mayor comodidad el desempeño de las tareas que exijan una mayor implicación y concentración visual. Un índice correcto de homogeneidad es algo esencial para el buen desarrollo de nuestras funciones y también para nuestra salud y productividad. Además, debe estar pensada para crear una atmósfera adecuada a las distintas necesidades de cada área y usuario. Una iluminación inadecuada causa enfermedades y molestias tales como: fatiga, mareos y dolores de cabeza, ansiedad, posiciones incómodas del cuerpo, falta de concentración e incluso accidentes, en el peor de los casos. Las lámparas de Goodwork disponen de ángulos de apertura de 120º por lo que producen una iluminación completamente fiable, teniendo como máxima prioridad, la mejora de las condiciones de trabajo y el rendimiento, reduciendo el riesgo de accidentes.

Como expertos fabricantes de iluminación LED, siempre te ofreceremos las soluciones ópticas y ergonómicas más eficientes. No lo dudes más y pásate al LED con Goodwork.

¿Lloverá hoy o no? Los LED te lo dicen

Cuando en Goodwork te decimos que la tecnología LED puede hacer mucho más por ti de lo que imaginas, creénos que es cierto. Hoy en día ya puedes encontrarla en muchas facetas de tu vida, facilitándote la rutina sin que apenas te des cuenta de su presencia, pero sí de sus beneficios.

Señales de tráfico iluminadas por LED, pasos de cebra que se iluminan con LED para hacerte saber cuando debes cruzar, tratamientos faciales con máscaras LED, ropa con tejidos convertidos en pantallas LED, etc. Aún así, nunca dejamos de asombrarnos y siguen apareciendo productos y aplicaciones nuevas de sistemas de iluminación LED, que mejoran nuestra calidad de vida y nuestra manera de interaccionar con los demás y con el entorno. Porque la tecnología LED es un mundo de investigación e innovación aún por explotar y con unas posibilidades infinitas.

El último invento que nos ha llamado la atención y del que queremos hablarte, es el smart umbrella, el paraguas inteligente. Un paraguas que mediante una luz LED te avisa de la climatología que va a hacer. ¿Sorprendido? Pues te aseguramos que esto no es ciencia ficción, es una realidad llevada a cabo por la start-up coreana Opus One, que ha desarrollado Jonas, el primer paraguas inteligente que conectado a tu Smartphone como una App más ofrece un servicio de previsión meteorológica.

Funciona con cuatro pilas, puedes encontrarlo en diversos colores a elegir y gracias a la vibración y al cambio en el color del LED que parpadea en la parte superior sabrás si va a llover o no. Si la luz es roja, lloverá, si la luz es verde, tranquilo, puedes dejarte a Jonas en casa, porque disfrutarás de un día soleado.

Pero esto no es todo, Jonas también tiene otras opciones inteligentes. Como avisarte mediante un mensaje a tu teléfono si te lo olvidas, pues el paraguas percibe que te estás alejando a más de diez metros; o vibrar en el caso de que sea el móvil el que te estás olvidando en algún lugar. Pero además, para los más despistados o los que vamos con mil cosas en la cabeza, tiene un sistema que mediante sonido y vibración, te hará detectar el teléfono sino recuerdas dónde lo habías dejado. ¿Cuántas veces te ha sucedido estar solo en casa y no poder llamarte a tu propio móvil y estar buscándolo durante un buen rato porqué no sabes dónde lo pusiste? Pues con este paraguas inteligente, esto no te pasaría más.

De momento tendremos que esperar para conocer a Jonas, puesto que sólo se está comercializando en Estados Unidos, China y Japón, pero que se preparen los presentadores de las predicciones meteorológicas de la tele porque puede que Jonas sea el nuevo “hombre del tiempo”.

¿Qué es un LED?

Hay tecnologías que cambian nuestra manera de ver el mundo y de movernos en él. Tecnologías que cambian la manera en la que nos comunicamos y nos relacionamos con los demás y con el entorno. Tecnologías que cambian la forma de hacer las cosas y mejoran sustancialmente nuestro día a día. Tecnologías como los sistemas de iluminación LED.

La luz tiene una gran capacidad evocadora y en la actualidad, no hay espectáculo, evento o lugar de moda que se precie, que no tenga un diseño de iluminación LED pensado al milímetro para despertar nuestros sentidos y nuestras emociones. Porque con la iluminación LED se puede hacer cualquier cosa. Sin embargo, estamos acostumbrados a ver proyectos de iluminación con LED en conjunto, en mosaicos; pero… ¿sabemos realmente qué es un LED?

¿QUÉ SIGNIFICA LED?

LED, es el acrónimo de “Light Emitting Diode”. Un LED es un diodo semiconductor, cuya característica principal es convertir en luz la corriente eléctrica de bajo voltaje que atraviesa su chip. El primer LED se desarrolló en 1927, aunque no fue hasta la década de los sesenta cuando se empleó con fines industriales. Desde entonces no ha cesado la investigación en este sector y actualmente, gracias a las ventajas del LED, la iluminación con LEDS está considerada la forma de iluminación más eficiente, utilizándose en infinidad de dispositivos que aportan mayor calidad de vida a nuestro día a día.

En sus inicios, el principal uso de esta tecnología se limitó a la fabricación de LED  de color rojo, al cual se le dio el uso de indicar si un equipo o aparato eléctrico o electrónico se encontraba conectado a la corriente eléctrica o se encontraba en funcionamiento. Posteriormente se empezaron a hacer paneles informativos con iluminación LED.

La innovación ha permitido que hoy en día se puedan comprar LED con la capacidad de reproducir todos los colores del espectro visible al ojo humano. En Goodwork, como fabricantes de LED, trabajamos continuamente en la investigación y el diseño de chips LED que incrementen considerablemente su eficiencia lumínica. Utilizamos chips de alta calidad y eficiencia, como los Nichia o CREE, que emplean materiales que ofrecen rendimientos superiores. Chips LED que llegan a alcanzar un nivel de potencia de 5.670 lúmenes/metro y una eficiencia lumínica de 236 lm/w, superior a la media de los fabricantes de LED en España.

¿CÓMO SE FABRICA UN LED?

Desde un punto de vista físico, un LED es un bulbo miniaturizado, carente de filamento o de cualquier otro tipo de elemento o material perjudicial, lo que es una de las grandes ventajas de la iluminación LED sobre otras tecnologías que contaminan el medio ambiente. Un LED tiene una construcción sólida, por lo que tiene mayor resistencia a golpes y vibraciones.

Hay distintos tipos de LED y el color que emite cada diodo depende fundamentalmente del material semiconductor que se haya empleado. Cada compuesto químico propio del material semiconductor utilizado en su fabricación determina cómo es la luz LED, ya que permite la emisión de una luz de un color específico, correspondiente a una determinada longitud de onda del espectro electromagnético visible al ojo humano.
Básicamente encontramos tres tipos de temperatura de color:

        • Blanco frío: 5800K. Luz blanca más intensa, ideal para parkings o trasteros, por ejemplo.
        • Blanco natural: 4500K. Una intensidad media considerada «luz día». Mejora la concentración, la productividad y el rendimiento. Recomendada para despachos y oficinas.
        • Blanco cálido: 3.000K. Una luz más tenue, más tirando a tonos cálidos anaranjados, ideal para salones o habitaciones dónde se busca un amiente más relajado.

El chip emisor de luz es la parte principal de un LED y se encuentra encerrado en una envoltura o cápsula de poliepóxido (resina) transparente o tintada del mismo color de la luz que emite. Estos pueden tener formas y tamaños diversos. Desde el chip parten dos terminales que atraviesan su base y salen al exterior para conectarse a un circuito eléctrico de corriente directa, de forma que el LED quede polarizado directamente. Cuando el LED es nuevo, el terminal más corto corresponde al polo negativo (–) del chip, mientras el más largo corresponde al polo positivo (+).

El chip es el principal componente de la iluminación LED y de su calidad depende, no sólo el consumo y la duración de la lámpara, sino también el color y la intensidad de la luz.

La iluminación LED es sin duda, la mejor apuesta para el futuro y la mejor opción, tanto para tu salud y tu bienestar, como para la de tu bolsillo. No lo dudes más y pásate al LED con Goodwork.

Iluminación que te inspira a vivir más tu ciudad: Puerto de Cambrils

Cambrils ha sido desde siempre un punto estratégico para el turismo de La Costa Dorada en España. Está situado en un entorno privilegiado y es uno de los municipios más poblados de la provincia de Tarragona.

Partiendo de la importancia de esta ciudad como destino turístico y con el deseo de crear una ciudad más inteligente, confortable y accesible para todos sus habitantes, el Ayuntamiento de Cambrils se preocupó por la mejora de sus infraestructuras y confió a Goodwork la tarea de renovar el alumbrado público existente, poniendo especial atención en la zona del puerto.

Goodwork es ya todo un referente a la hora de pensar en iluminación LED de vía pública con proyectos como el de la zona amurallada de Morella, municipio que fue galardonado con el título de “El pueblo más bonito de España”, después de ser iluminado por Goodwork.

En esta ocasión, nos centramos en espacios comunes de ocio y de entretenimiento del puerto de la ciudad de Cambrils. A parte del puerto deportivo y el club naútico, todo el bellísimo y amplio paseo marítimo de 9 km incluye carril bici y llega hasta Salou.

Se sustituyó la iluminación existente por tecnología LED de alta calidad y eficiencia energética.Se emplearon luminarias atractivas y modernas manteniendo el encanto del lugar. Lámparas energéticamente eficaces y de sencilla instalación y mantenimiento como la GW Eco Street Light, la GW LED Flood Light y la GW Lira Street Light.

También se sustituyó la iluminación convencional por tecnología LED de alta calidad con nuestro producto GW LED Street Plate. Una fuente de luz que con sólo 40W alcanza la misma salida que un sistema de iluminación convencional de vapor de sodio de 150W. La GW LED Street Plate ofrece larga durabilidad (más de 50.000 horas), un bajo índice de calentamiento y es ecológica y respetuosa con el medio ambiente, al no emitir agentes nocivos a la atmósfera. Por lo que es la iluminación ideal para zonas arboladas y parques. Además, gracias a sus 120º de apertura, no se generan conos de sombra consiguiéndose una iluminación homogénea e uniforme.

El resultado final es una iluminación que enriquece la visibilidad del entorno haciéndolo más cómodo y atractivo. Una iluminación que cumple con las más altas exigencias de eficiencia energética, reduciendo considerablemente el gasto en consumo de luz para el municipio. Algo básico a tener en cuenta en programas de ahorro energético y pensando de cara, no sólo al futuro, sino al presente, en términos de sostenibilidad y optimización de recursos. Es esta, sobre todo, una iluminación que satisface las necesidades de seguridad y confortabilidad, tanto de viandantes, como de conductores.

Gracias a la iluminación de vía pública de Goodwork, los vecinos de Cambrils podrán disfrutar al pasear y al hacer deporte junto al mar, también por la noche, sintiéndose más cómodos y seguros. La homogeneidad que proporcionan nuestras lámparas inspira y motiva a que todo tipo de usuarios: caminantes, ciclistas, runners, conductores… vivan más su ciudad. Porque lo que nos importa, son las personas.

No lo dudes más y pásate al LED de calidad con Goodwork.

Human centric lighting: Una generación de luz que mejore la experiencia humana

En la actualidad, es muy común oír hablar de la iluminación LED, de su bajo consumo y gran ahorro, de que son las bombillas más sostenibles que existen y las que menos dañan el medio ambiente, etc. Pero… ¿se sabe hasta que punto la iluminación LED tiene ventajas en la salud y el comportamiento del ser humano?

Las investigaciones en Human Centric Lighting se basan en la adaptación de la luz a las necesidades correspondientes del usuario para alcanzar una calidad máxima de iluminación. La luz no sólo sirve para orientarnos visualmente y movernos en el mundo en el que vivimos. Algunas longitudes de onda existentes en el espectro luminoso tienen una influencia notable sobre nuestra fisiología. La capacidad de concentración, la productividad y el rendimiento, los ritmos circadianos y en general, nuestro bienestar, puede verse alterado por una iluminación inadecuada.
Ya que a día de hoy las ventajas del LED están más que probadas, los avances en esta tecnología pueden centrarse en ofrecer un verdadero valor para mejorar la calidad de vida de las personas, yendo más allá de las razones económicas, energéticas y medioambientales. O sea, influir en aspectos que tengan que ver con el confort, la conducta y la salud humana a través del exhaustivo estudio de la intensidad, el espectro, la distribución espacial y angular… entre otras cosas.
Es un campo muy amplio y aún por explorar puesto que nuestro cerebro consta de una estructura realmente compleja y procesa y manipula las respuestas sensoriales con gran maestría. Podemos llegar a convencernos de que nos sentimos de una determinada manera, cuando nuestro cuerpo en realidad nos está diciendo que siente algo completamente distinto. Además, se sabe que existe una respuesta temprana a la iluminación que se escapa a nuestro control consciente, ya que podemos encontrarla en organismos primitivos que existían mucho antes de que hubiera seres humanos, o animales.

¿Cómo influye la luz sobre las personas?

La luz (tanto la visible, como la invisible) influye en la bioquímica del cerebro, los sistema endocrinos y los procesos metabólicos, por lo que hay que dirigirse hacia el objetivo de lograr una generación de luz que mejore la experiencia humana.

Los estudios en Human Centric Lighting basan sus esfuerzos en tres aspectos estrechamente relacionados entre sí y que no pueden estudiarse de manera aislada: el efecto visual, el no visual y el emocional de la luz.

  1. Efecto visual: Lograr que la luz sea visualmente efectiva para conseguir aquello que deseamos: destacar una zona en concreto, conseguir homogeneidad, etc.
  1. Efecto no visual: Imperceptible para el ojo humano, pero perceptible para nuestro cerebro. La luz puede tener un efecto activador o tranquilizante que regule nuestros ritmos biológicos.
  1. Efecto emocional: Indudablemente la luz genera emociones en el ser humano. Por eso, de normal cuando el sol nos sentimos más alegres y cuando llueve varios días seguidos, nos sentimos más apagados y melancólicos. La iluminación LED puede inducir de forma controlada y muy precisa, determinadas emociones en nosotros.

Los estudios científicos en Human Centric Lighting van enfocados básicamente al desarrollo de beneficios psicológicos y fisiológicos en el ser humano a través del diseño de diversos tipos de iluminación:

 – Iluminación Circadiana:

La composición espectral de la luz natural cambia a lo largo del día con el paso de las horas. Este cambio es el que hace que nuestros biorritmos, nuestros ritmos circadianos sean estables. Que nos despertemos cuando salga el sol y nos vayamos a dormir cuando es de noche.

Una diseño de iluminación adaptado a los ritmos circadianos nos ofrecerá la posibilidad de controlar la composición espectral durante el curso del día en analogía a la luz diurna (una luz más fría es las horas de actividad y una luz más cálida en las horas de relajación previas al sueño).

 – Iluminación Dinámica:

La luz con tonalidad blanco frío (con un alto componente de azul) tiene un efecto activador sobre el organismo. Aumenta el rendimiento, la productividad y la capacidad de concentración.

 – Iluminación Relajante:

La luz con tonalidad blanco cálido (con un alto componente de rojo) tiene un efecto relajante sobre nuestro organismo.

 – Iluminación Emocional:

Luz blanco cálido, blanco frío, blanco natural o color. Las necesidades, gustos y percepciones de las personas son muy personales y también depende de su situación. Por eso la iluminación también debe poder adaptarse a la atmósfera, el momento y el estado de ánimo.

No lo dudes más y pásate al LED con Goodwork.

¿Cómo se fabrica un LED?

Seguro que estás habituado a convivir en tu vida cotidiana con la tecnología LED, algunas veces incluso sin saberlo. La iluminación de aquel restaurante al que fuiste y te gustó tanto, la atmósfera tan acogedora de ese hotel en que el pasaste las vacaciones… La tecnología LED es capaz de crear ambientes inolvidables, saludables y además, económica y energéticamente eficientes.

Pero… ¿te has preguntado alguna vez cómo se fabrica un LED? Sigue leyendo, en Goodwork te lo contamos.

¿Qué es un LED?

Un LED (acrónimo de “Light Emitting Diode”), es un diodo semiconductor, cuya característica principal es convertir en luz la corriente eléctrica de bajo voltaje que atraviesa su chip. El primer LED se desarrolló en 1927, aunque no fue hasta la década de los sesenta cuando se empleó con fines industriales.

Desde entonces no ha cesado la investigación en este sector y actualmente, la iluminación LED, está considerada la forma de iluminación más eficiente, utilizándose en infinidad de dispositivos que aportan mayor calidad de vida a nuestro día a día.

En sus inicios, el principal uso de esta tecnología se limitó a la fabricación del LED de color rojo, al cual se le dio el uso de indicar si un equipo o aparato eléctrico o electrónico se encontraba conectado a la corriente eléctrica, o se encontraba en funcionamiento. Posteriormente se empezaron a hacer paneles informativos con iluminación LED.

La innovación han permitido que hoy en día se fabriquen LED con la capacidad de reproducir todos los colores del espectro visible del al ojo humano. En Goodwork como fabricantes de LED, trabajamos continuamente en la investigación y el diseño de chips LED que incrementen considerablemente su eficiencia lumínica.

Desde un punto de vista físico, en la fabricación de un LED, nos encontramos con un bulbo miniaturizado, carente de filamento o de cualquier otro tipo de elemento o material perjudicial, lo que es una de las grandes ventaja de la iluminación LED sobre otras tecnologías que contaminan el medio ambiente. Un LED tiene una construcción sólida, por lo que tiene mayor resistencia a golpes y vibraciones.

Composición de un componente LED

El color que emite cada diodo depende fundamentalmente del material semiconductor que se haya empleado en la fabricación del LED.

Cada compuesto químico propio del material semiconductor utilizado en la fabricación de un LED, permite la emisión de una luz de un color específico, correspondiente a una determinada longitud de onda del espectro electromagnético visible al ojo humano.

El chip emisor de luz es la parte principal de un LED y se encuentra encerrado en una envoltura o cápsula de poliepóxido (resina) transparente o tintada del mismo color de la luz que emite. Estos pueden tener formas y tamaños diversos.

Desde el chip parten dos terminales que atraviesan su base y salen al exterior para conectarse a un circuito eléctrico de corriente directa, de forma que el LED quede polarizado directamente. Cuando el LED es nuevo, el terminal más corto corresponde al polo negativo (–) del chip, mientras el más largo corresponde al polo positivo (+).

El chip es el principal componente de la iluminación LED y de su calidad depende, no sólo el consumo y la duración de la lámpara, sino también el color y la intensidad de la luz.

¿Cómo se fabrica un LED?

La fabricación de un LED se basa fundamentalmente en la creación del chip. Se elabora el sustrato o base semiconductora sobre la que se aplicarán posteriormente el resto de componentes.

Esta base es una oblea (wafer) de unos 15 cm de diámetro, normalmente de carburo de silicio o zafiro que se forma en una cámara a una alta temperatura y presión y sobre la que se trabajan elementos distintos dependiendo de las características de la luz que se deseen conseguir.

Principalmente:

  • Nitruro de indio y galio (InGaN): para la luz azul.
  • Fosfuro de aluminio, indio y galio (AllnGaP): para la luz cálida con tonos amarillos, naranja y rojos.
  • Fosfuro de galio (GaP): para la luz amarilla y verde.

Las altas temperaturas y la presión hace que los elementos se licuen hasta convertirse en una solución. Para que no se escape el gas se utiliza una capa líquida de óxido de boro (encapsulación líquida).

Cuando los elementos están mezclados en una solución uniforme, se introduce una barra y se saca muy lentamente. La solución se va enfriando y las cristalizaciones se forman al final de la barra. Las obleas se limpian mediante un proceso químico y ultrasónico. Es muy importante que se elimine toda la suciedad y el polvo para obtener mejores resultados.

Después viene el proceso de epitaxia, que se utiliza en la fabricación de un LED con todo tipo de chips, en el que se conforman las capas necesarias para el correcto funcionamiento del LED con estos materiales depositados.

A continuación la oblea se divide en rectángulos diminutos, que son los propios chips. Estos chips pasan por rigurosos tests de calidad para comprobar que la intensidad, el color y el brillo de la luz es la requerida.

En Goodwork, como fabricantes de LED, utilizamos chips de alta calidad y eficiencia, como los Nichia o CREE, que emplean materiales que ofrecen rendimientos superiores. Las tiras de LED de Goodwork, por ejemplo, llegan a alcanzar un nivel de potencia y eficiencia de un total de 5.670 lúmenes/metro y una eficiencia lumínica de 236 lm/w, superior a la media de los fabricantes de LED en España.

No lo dudes más y pásate al LED con Goodwork.

Los beneficios de la iluminación LED en almacenes

En Goodwork llevamos años estudiando cómo crear espacios que doten de mayor comodidad y eficacia a las personas, cuando estas realizan tareas que implican una exigencia visual importante. La iluminación industrial, debe estar diseñada para crear una atmósfera adecuada a las diferentes necesidades de cada área y usuario.

Unas condiciones inadecuadas para la visión, pueden causar molestias y enfermedades como: fatiga, dolor de cabeza, accidentes, ansiedad, posiciones incómodas del cuerpo y reducción en el nivel de productividad.

En Goodwork, siempre procuramos ir un paso por delante en lo que a investigación e innovación de la ergonomía visual se refiere, y así,  poder ofrecerte las mejores soluciones adaptadas a tus necesidades y a las de tu equipo y  tu empresa.

Iluminación LED en almacenes

A la hora de realizar un diseño de iluminación LED hay que tener en cuenta la estética y el atractivo visual, pero sobre todo, y poniendo mucho más enfásis si cabe, en áreas de trabajo, la iluminación debe ser funcional. Debe ser eficiente energéticamente y potenciar la productividad del equipo humano, para que este de lo mejor de sí y no sufra trastornos o alteraciones.

Esta iluminación debe ser fiable y tener como máxima prioridad la mejora de las condiciones de trabajo y el rendimiento, reduciendo el riesgo de accidentes. Las luminarias LED de Goodwork cumplen con los más altos requisitos para que las áreas de trabajo funcionen de manera óptima.

Para iluminar naves, almacenes, líneas de producción y logística y, en general, ambientes industriales, Goodwork dispone de tecnología LED altamente eficientes y adaptables a techos de gran altura. Lámparas LED que consiguen un gran aprovechamiento de la energía y son fáciles de mantener gracias a su sencilla instalación y su larga vida útil.

Además, en este tipo de espacios en los que se trabaja las 24 horas del día, es muy importante poder conseguir una buena optimización de la iluminación. Los producto LED de Goodwork permiten agregar  sistemas de control de luz inteligentes, lo que permite gestionar el control individual de las diversas zonas, optimizando y sacando así, el máximo potencial.

Los sistemas de control de luz inteligentes permiten el aprovechamiento de cada escena lumínica. En Goodwork disponemos de controles de regulación multikevin (que cambian de temperatura de color), de intensidad, de presencia y de movimiento.

Nuestros modelos de lámparas LED adaptadas a soluciones industriales como la campana GW Industrial Light, GW Fluornet  y los proyectores GW Industrial Flood Light, son luminarias eficientes y ecológicas (respetan el medio ambiente, al no emitir gases nócivos a la atmósfera).

Todas ellas, aúnan un alto rendimiento lumínico y un ahorro de consumo inmejorable ahorros de hasta un 70%-80% comparados con iluminación convencional, lo que permite amortizar la inversión en pocos meses).

Los materiales y las ópticas ultilizadas en este tipo de lámparas LED, están diseñadas especialmente para el aprovechamiento absoluto del flujo luminoso. Son productos que trabajan a pleno rendimiento en condiciones extremas de humedad, temperaturas desde -35ºC a 60ºC, o con grandes cantidades de polvo y suciedad.

No lo dudes más y pásate al LED con Goodwork.

La tecnología LED podría desbancar a los códigos QR

Un código QR, «quick response code» o «código de respuesta rápida», es un módulo que almacena información en un código de barras bidimensional. Esta tecnología, fue creada en 1994 con el objetivo de permitir leer contenidos a alta velocidad. Estos códigos (que normalmente te llevan a una URL), te permiten interactuar con el mundo a través de tu teléfono o tablet. Es común encontrarlos en folletos publicitarios, revistas, pósters, carteles… y también se han utilizado como herramienta de marketing por muchas marcas para promocionar sus productos o servicios. Sin embargo, a pesar de su boom inicial, sobre todo en países como Japón, en los que su uso es muy popular, esta tecnología parece tener los días contados.

Ya hace dos años que los códigos QR se ven amanazados por la propuesta de la compañía Fujitsu de crear un sistema que consiste en la emisión controlada de impulsos de LED sobre los objetos. Pero… ¿cómo funciona exactamente? La clave es que, esta emisión controlada de pulsos LED sobre el objeto, provoca una iluminación que fluctua lo suficientemente rápido y en tres colores distintos: verde, rojo y azul; para que el ojo humano no lo perciba, pero sí la cámara de un smartphone. El usuario simplemente necesita descargarse una aplicación y desde ella, apuntar con el móvil al objeto sobre el que desea obtener más información. Entonces el software interno detectará el código binario insertado en las variaciones de la luz y descifrará la información oculta.

El objetivo es que se implante primero en lugares públicos como universidades, galerías, salas de congresos, centros culturales, museos, ferias… De momento, no está tan dirigido a productos cotidianos, aunque si se ha probado con alimentos frescos y se sabe que es totalmente inocuo. Además de ésta, otras ventajas de los códigos QR son:

– No hace falta imprimir y pegar el código en cada producto, por lo que se ahorra, tiempo y dinero.

– Se puede actualizar la información de manera mucho más rápida y sencilla.

– Se mantiene la estética intacta del producto al no tener que poner el código sobre él.

¿Te imaginas que con sólo apuntar con tu teléfono móvil al televisor o a la pantalla del ordenadir cuando apareciera anunciado un producto que te guste pudieras saber todas sus características, su precio y dónde adquirirlo? La tecnología LED nos demuestra una vez más que todo es posible y además, en un futuro, no tan lejano.

¿Qué hace a una ciudad una verdadera Smart city?

Las ciudades, son grandes centros consumidores de recursos. Hay estudios que afirman, que las ciudades, son responsables del 75% del gasto de la energía mundial; y que generan el 80% de los gases que provocan el efecto invernadero. Sin embargo, esto puede cambiar. Se estima que en el año 2050, un 85% de la población vivirá en smart cities, pero… ¿qué significa este concepto que parece estar tan de moda?

Una smart city (o «ciudad inteligente») es un concepto emergente que se refiere a un tipo de desarrollo urbano basado en la sostenibilidad y las estructuras eficientes capaces de satisfacer las necesidades básicas de instituciones y empresas, pero sobre todo, de ciudadanos. Son muchos los agentes que se ven implicados en este cambio, pero el ciudadano es el objetivo final y el que tiene que sentirse implicado e inspirado para ser partícipe en esta transformación, tanto a nivel social, como económico, operativo y ambiental.estas ciudades se sirven de infraestructuras, innovación y tecnología para disminuir el consumo energético y reducir las emisiones de CO2.

A pesar de que son las instituciones las encargadas de poner en práctica las políticas públicas y las empresas las encargadas de potenciar el crecimiento y el desarrollo de la actividad, el ciudadano tiene tres funciones clave: como demandante, como consumidor y en algunas ocasiones, será el propio proveedor de soluciones. Es por eso muy importante, que todos tomemos conciencia de la situación y trabajemos unidos para cumplir las iniciativas que nos llevarán a encontrar el máximo bienestar en nuestra ciudad.

¿Cuáles son los problemas con los que nos encontramos actualmente en nuestras ciudades?

  • El consumo energético
  • Las emisiones de dióxido de carbono
  • La provisión de bienes y materias primas
  • La prestación de servicios y la seguridad de todos los residentes
  • La eficaz planificación de la movilidad urbana

La ciudad debe cumplir una serie de características esenciales para ser considerada una smart city:

  • Sostenibilidad: eficiente en todos sus ámbitos sociales, económicos y medio ambientales. Debe existir una buena previsión de los recursos naturales (y una tendencia hacia el declive de aquellos no renovables) y un uso consciente del entorno, mediante un fuerte compromiso entre todos los agentes implicados. Por ejemplo, el potenciamiento de los vehículos eléctricos.
  • Modernidad e innovación: que repiense y mejore las estructuras de la ciudad. Que oriente siempre la innovación hacia el confort brindando los mejores servicios en: iluminación, agua, electricidad, gas, telecomunicaciones, transportes, seguridad, equipamientos, edificaciones… en este sentido, podemos hablar de edificios inteligentes. Edificios en los que la domótica jugara un papel primordial.
  • Interconexión: estamos en la era digital, hay que aprovechar al máximo las posibilidades que nos permiten las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación (TIC). Estas tecnologías de la información ayudarán a la hora de controlar los diferentes subsistemas que componen la smart city. Esto también incluye sensores inteligentes que recopilarán datos continuamente a cerca del estado de cada subsistema para comprobar que cada uno cumple su función. Por ejemplo, cada usuario podrá leer los datos de su gasto energético a tiempo real a través de telecontadores.
  • Participación ciudadana: los ciudadanos deben tener un papel activo, implicarse en la gestión de la ciudad y sus recuros para conseguir una buena calidad de vida. Debe existir una gobernanza plural y la relación con el resto de agentes sociales debe ser transparente y fluida.

Goodwork, como fabricantes de smart lighting estamos muy comprometidos con el paso hacia las smart cities. Fomentamos la iluminación inteligente gracias a la continua búsqueda e investigación  en productos de alta calidad y tecnología. Con esto mejoramos y garantizamos una alta eficiencia energética, y por consiguiente aumenta el ahorro; algo muy interesante para los ayuntamientos a la hora de enfrentar el cambio hacia la conversión auténtica smart cities.

Además en Goodwork nos encargamos también del mantenimiento y la gestión de incidencias de la iluminación que se renueva (instalaciones de cuadros de alumbrado, etc.) y ofrecemos un avanzado sistema de gestión “punto a punto” con software web específico. El llamado sistema SMART CITY, que monitoriza cada punto de consumo del alumbrado público en una red de conexión de todos los componentes, con un software de gestión personalizado a cada instalación. Es decir, la capacidad de regular y gestionar de forma individualizada cada punto de iluminación del municipio.

No lo dudes más y pásate al LED con Goodwork.

Cinco factores a tener en cuenta para elegir tu bombilla LED

El ahorro, tanto en el hogar (que en Europa supone el 30% del consumo energético total), como en las empresas, es algo que se hace necesario en los tiempos que corren. Esto, sumado a que cada vez tomamos más conciencia ecológica, hace que optemos por tecnologías más eficientes y respetuosas con el medio ambiente, como la tecnología LED.
Que las bombillas LED tienen enormes ventajas frente a la iluminación tradicional no cabe duda, pero a la hora de elegir tu bombilla LED… ¿Sabes cuál es la que más te conviene? Son muchos los modelos y productos que podemos encontrar en el mercado actualmente, por lo que a veces, resulta complicado saber cuál es la bombilla perfecta para lo que realmente necesitamos. Para saber elegir la bombilla idonea, tienes que tener en cuenta, además de tus necesidades, la aplicación de la misma y fijarte en unos aspectos básicos tales como: el tipo de material de la propia bombilla, la potencia y el flujo luminoso, el ángulo de apertura de la luz, la temperatura de color y la instalación.

¿QUÉ TIPO DE BOMBILLA LED ELIJO?

En el momento de seleccionar una bombilla LED es muy importante a tener en cuenta el propio material del que esté realizada. Cuanta más densidad de material activo, más eficiente es. Que un LED emita más luz depende de la cantidad de este material activo, o sea, del material que convierte la electricidad en fotones. Las bombillas LED se diferencian también, entre otras cosas, por los LEDs que pueden contener: desde 3 (las más comunes para uso doméstico son las de 3 ó 5 LEDs), hasta 20. Goodwork te garantiza bombillas de alta densidad y alta durabilidad.

¿QUÉ POTENCIA NECESITO?

Existe un error muy común y es escoger la bombilla por su potencia, cuando en realidad lo que nos interesa es la cantidad de luz que emite. Para hablar de esto tenemos que tener dos conceptos muy claros: qué son lo vatios (W) y qué son los lúmenes (lm). Los vatios nos indican lo que consume la bombilla en términos de electricidad y los lúmenes, la luz que genera esa fuente luminosa, el flujo luminoso. La gran ventaja de las bombillas LED es que nos dan muchos lúmenes a pocos vatios, esto supone ahorros de un 80% en electricidad (cuenta que lo que pagas es la cantidad de vatios consumidos).

En Goodwork tenemos luminarias con una eficiencia energética de hasta 220 lm/w, por lo que se logra un ahorro económico importante optimizanzo la energía en mayor medida que otros productos de la competencia con similares características. Cuando hablamos de eficiencia lumínica o energética nos referimos a la cantidad de luz emitida en relación a la energía consumida. Se mide en lúmenes por vatio (lm/W). Para que sea más fácil de entender pondremos un ejemplo:

  • Una bombilla incandescente de 60W produce 800 lúmenes. Si dividimos 800 entre 60 el resultado es 13 lm/W.
  • Un fluorescente de 20W produce 800 lúmenes. Si dividimos 800 entre 20 el resultado es 40 lm/W. Algo más eficiente que la incandescente.
  • Una bombilla LED de 9W produce 800 lúmenes. Si dividimos 800 entre 8 el resultado es 88 lm/W. El doble de eficiencia que una fluorescente y casi siete veces más eficiente que una incandescente común.

¿QUÉ ÁNGULO DE APERTURA QUIERO?

En Goodwork se utiliza una avanzada y sofisticada tecnología de la óptica en tecnología LED, por lo que con sólo una bombilla puedes llegar a iluminar una estancia. Dependiendo del espacio y su tamaño y del efecto que quieras dar al ambiente a iluminar, debes elegir un ángulo de apertura de la luz u otro. Este parámetro nos orientará a escoger la iluminación adecuada:

  • Un ángulo cerrado (40º) nos dará una iluminación más puntual. Iluminará un espacio menor, pero será más focalizado. Por ejemplo, si deseas iluminar algo en concreto: una mesa en un restaurante, una vitrina en el salón, un cuadro en una galería, etc.
  • Un ángulo más abierto (120º) nos brindará una iluminación más homogenea. Por ejemplo, para iluminar una habitación (de unas dimensiones normales).

¿QUÉ TIPO DE LUZ ME CONVIENE?

Cuando un cuerpo negro es calentado, emite luz de diferente color según la temperatura a la que lo calentemos. Es así cómo se mide la temperatura de color en grados Kelvin, asociando un color a la temperatura a la que debería estar un cuerpo negro para emitir ese mismo color. Es muy importante saber que la temperatura de color asociada a un cuerpo no es su temperatura real.

Las bombillas LED se dividen según su temperatura en 3 tipos y en Goodwork recomendamos el uso de cada color para una aplicación:

  • Blanco frío: 5800K. Luz blanca más intensa, ideal para parkings o trasteros, por ejemplo.
  • Blanco natural: 4500K. Una intensidad media considerada «luz día». Mejora la concentración, la productividad y el rendimiento. Recomendada para despachos y oficinas.
  • Blanco cálido: 3.000K. Una luz más ténue, más tirando a tonos cálidos anaranjados, ideal para salones o habitaciones dónde se busca un amiente más relajado.

¿QUÉ TIPO DE INSTALACIÓN NECESITO?

Hoy en día en nuestros hogares y lugares de trabajo conviven bombillas incandescentes, fluorescentes, halógenos… es muy útil investigar si en estas instalaciones podemos sustituir o reutilizar parte de ella para hacer el cambio a tecnología LED. Hay que tener en cuenta los transformadores, si podemos reutizarlos o nos merece la pena eliminarlos y conectar directamente la bombilla LED a la red y también ten en cuenta que si tienes sistemas dimmables (sistemas que regulan la intensidad de la luz) pueden aprovecharse si son compatibles con las nuevas bombillas.

No lo dudes más y pásate al LED con Goodwork.